Las Moon Boot, Protección de Creaciones e Innovaciones
Las Moon Boot® son, posiblemente, las botas après sky más famosas del mundo. Se crearon en 1970, inspiradas en las usadas por Neil Armstrong y los primeros astronautas que llegaron a la luna.
Son por tanto muchas las empresas que fabrican y comercializan botas similares, pero ¿es esto posible? ¿Se pueden proteger? ¿Cuáles son los límites en la copia de creaciones ajenas?
El calzado, como cualquier otra creación, puede estar protegido por diferentes derechos de propiedad intelectual (incluida la industrial), de forma acumulada. Pero para merecer tal protección se han de cumplir con los requisitos legales para cada una.
Elegir la protección adecuada es muy importante para su validez y la defensa efectiva posterior de nuestra creación frente a terceros.
En el caso de las botas MOON BOOT®, se ha protegido como marca dicha denominación, pero la apariencia de la bota, nueva y singular en los 70, pudo protegerse como diseño industrial, registrado o no, y, además, si tiene altura creativa, cuestión difícil de determinar, por los derechos de autor.
La protección del diseño industrial y los derechos de autor está limitada en el tiempo. Por otro lado, los derechos de autor y el diseño no registrado solo son oponibles frente a quien “copia”, pero no frente a quien llega de forma autónoma a una creación demasiado similar o no diferente en su conjunto.
No pudo probar lo anterior la famosa influencer italiana, Chiara Ferragni, ni las empresas que fabricaban su bota “inspirada” en la Moon Boot®, cuya notoriedad jugó además en su contra, que fueron condenadas por infringir los derechos de autor de Técnica SpA sobre dichas botas.
Para el Tribunal de Milán que llevó el caso, no se trata de unas simples botas de nieve, sino de una obra protegida por derechos de autor según la Ley italiana. Según este tribunal, con sede en la capital de la moda, las diferencias entre unas y otras, por el añadido de brillo y glitter, no son suficientes para reclamar “autonomía creativa que en realidad se reduciría a la extravagancia conferida a las modelos por el uso de purpurina«.
¿Podemos usar la marca tridimensional para una protección reforzada de la apariencia de un zapato o bota sin límite de tiempo?
Eso pensó Tecnica Spa cuando en 2011 registró ante la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) la forma de sus famosas botas como marca 3D.
Sin embargo, la marca 3D para la forma de las Moon Boot® ha sido anulada mediante decisión de 18 de mayo de 2020 de la Primera Sala de Recurso de la EUIPO: a una marca se le exige distintividad, capacidad para indicar al consumidor cuál es el origen empresarial del producto, y que una forma sea original o estéticamente atractiva no implica distintividad. En este caso a la oficina europea no le pareció que la forma de estas botas (sin la denominación Moon Boot®) sirviese para informar al consumidor sobre el origen empresarial de las mismas al momento de la solicitud de registro, ya que los elementos no funcionales que definen la forma de las botas eran ya en ese momento habituales o comunes dentro de la industria del esquí.
De momento, parece que a Tecnica Spa le quedan los derechos de autor y el diseño, registrado y en vigor, para un sofá con la forma de la icónica bota de aprês sky.